Coraje Aussie

Coraje Aussie

20 abril, 2020 Desactivado Por social

La época más salvaje tuvo protagonistas que terminaron sus carreras con sus cuerpos tocados. ¿Las motos? dos tiempos, con más 200cv para 150kg de peso. Eran de otra pasta pero el que más sufrió para llegar a vencer un título fue Mick Doohan. Aunque eso solo fue el principio de uno de los mejores pilotos que ha pasado por el mundial de velocidad.

Michael Doohan nació en la localidad australiana de Brisbane y a  la edad de 9 años empezó a correr en carreras locales en las que realizó grandes actuaciones hasta que debutó con 19 años una Yamaha RZ 350.

La marca de los diapasones fue la que le permitió progresar en sus inicios en las carreras que curiosamente fueron en la categoría de Superbike y en la resistencia japonesas. En 1988 consiguió la victoria en la segunda manga de la carrera inaugural en el circuito nipón de Sugo. El australiano realizó una demostración de fuerza tal que las grandes fábricas le ofrecieron un asiento para la temporada siguiente en 500cc. Doohan eligió Honda formando una de duplas más famosa de la historia de las carreras.

Durante los dos primeros años en 500cc fue constante. Por un lado fue capaz de hacer frente a su compatriota en HRC, Wayne Gadner y logró acercarse a las prestaciones de rivales como Wayne Rainey, Eddie Lawson y Kevin Schwantz. En 1992 comenzó con un ritmo y una rapidez inalcanzable para el resto. Gano 5 de las primeras 7 carreras hasta que llegó al circuito Holandés de Assen.

Cuando se rompió la pierna derecha en Holanda tenía 53 puntos de ventaja sobre Kevin Schwantz a falta de cinco carreras para el final. La mala praxis médica del facultativo holandés que le operó por primera vez casí le hizo perder la extremidad a a causa de la gangrena.

La intervención del Doctor Costa fue lo que permitió que su carrera no terminara aquel fin de semana. Incontables operaciones después, sesiones de cámara hiperbárica acompañadas por mucho dolor no le hicieron desistir.

A partir de ese momento Mick Doohan demostró que en su vocabulario no existía la palabra desaliento. Volvió 4 carreras después para terminar perdiendo el título frente a Wayne Rainey por solo cuatro puntos.

La gravedad de su lesión en la pierna derecha era tal que no la sentía al pilotar-apenas podía andar- y eso era un problema porque utilizaba mucho el freno trasero para meter su NSR en las curvas. En Suzuka en 1993 tuvo una idea para sortear este inconveniente: propuso la colocación de una palanca en el lado izquierdo del manillar para poder accionarlo con el pulgar y su pilotaje mejoró de manera paulatina hasta finalizar cuarto y operarse al final de temporada nuevamente de su pierna para fortalecerla.

En 1994 empezó una racha triunfal que significó 5 mundiales seguidos. Su gran rival en ese periodo fue Alex Crivillé que mantuvo activa la motivación de un piloto que tuvo todo en contra, se levantó varias veces y consiguió su sueño de la infancia con más sufrimiento del que seguro se esperaba. En 1998 logró su último título frente a Max Biaggi que fue un correoso rival en su debut porque el cambio a gasolina sin plomo dulcificó los motores de las 500cc y eso beneficiaba a los debutantes.

La temporada de 1999 no comenzó de la mejor manera porque sus rivales estaban más cerca que eb años anteriores En Jerez quiso dar un golpe de efecto. Quería demostrar que seguía siendo el que mandaba, humillando a su compañero de equipo en su circuito y se cayó-iba más de un segundo más rápido que los demás- fracturándose de nuevo la pierna derecha, la muñeca y el hombro.

Una cuenta corriente saneada, la demostración de los 5 años anteriores y la dificultad de la recuperación de las lesiones precipitó la retirada de uno de los pilotos más valientes de la historia de los grandes premios. En la actualidad sigue ligado a Honda y su hijo ha entrado en el programa de pilotos de Red Bull, esta vez sobre cuatro ruedas y si se parece a su padre…